Violencia armada ‘bañó de sangre’ a Alabama y un distrito de entretenimiento en Ohio. También a Arkansas y todo durante el pasado fin de semana, el primero del verano estadounidense.
De acuerdo a un reporte de la Voz de América (VOA), se trató del segundo fin de semana seguido en que hubo un brote de violencia armada en los Estados Unidos, lo que llevó a muchos alcaldes a pedir ayuda.
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En Michigan, un policía fue mortalmente baleado cuando perseguía a un automóvil presuntamente robado, en lo que la agencia calificó de emboscada.
Por su parte, en Filadelfia, un policía fue herido de gravedad el sábado al parar un automóvil que llevaba a cuatro personas.
Asimismo, la policía en Montgomery (Alabama) señaló que cientos de balas fueron disparadas en una concurrida fiesta la madrugada del domingo, que dejaron a nueve personas heridas.
Lo más abrumador, es que el jefe policial interino John Hall precisó que los detectives recuperaron hasta más de 350 casquillos de bala.
También hubo disparos el domingo en la mañana en la vía principal de un popular distrito de restaurantes y entretenimiento en Columbus, en Ohio. Al menos 10 personas resultaron heridas, una en condición crítica, lo que llevó al alcalde a pedir más medidas de las autoridades locales y federales para mantener las armas lejos de las calles.
SUPERMERCADO EN ARKANSAS
En tanto, en un supermercado de Fordyce, Arkansas, cuatro personas murieron y otras 11 resultaron heridas, entre ellas el presunto agresor. Este hecho se registró el viernes.
