Una madre desalmada enfrenta cargos de asesinato en Galveston, Texas, luego que la policía la arrestara por lanzar a su hija de 17 meses desde un tercer piso y lo hizo sin saber que una cámara de vigilancia la estaba grabando.
La mujer identificada como Channel Yonko cometió el crimen en un hotel, causándole la muerte a la pequeña. Luego, intentó huir, pero las autoridades la arrestaron.
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De acuerdo a Mirror, las imágenes de la cámara de seguridad mostraron el desgarrador momento.
Documentos judiciales además revelan que la bebé tenía tres heridas punzantes. Después que la encontraran en la acera, llevaron a la pequeña Hannah a un centro médico. Al poco tiempo la declararon muerta.
La pronta actuación de los agentes de la ley permitió identificar y capturar a la madre de la niña de 17 meses tras huir del sitio.
ENCONTRADA VAGANDO POR LAS CALLES
A la asesina la encontraron vagando por las calles, a 800 metros del hotel. En un inicio, le dijo a los funcionarios que su hija no estaba bien. Luego, se comportó de forma errática y entró en llanto, lo qué llevó a los efectivos a escoltarla de regreso a la estación policial.
Una vez allí, se negó a dar su nombre y a cooperar con las autoridades.
El aterrador caso de la niña se agravó cuando la hermana de la mujer narró a la policía que vio a Channel empujando un coche de bebé en The Victorian. Esto la llevó a dar por sentado que su sobrina Hannah estaba dentro de este. Sin embargo, esta se desconcertó cuando Channel le dijo: «No regreses al hotel».
Luego de la investigación, la policía descubrió que la mujer se alojaba en la habitación 217 del hotel. Además, en una bolsa de basura hallada en el recinto se encontró una tarjeta de acceso a dicho dormitorio. También había un cuchillo, ropa de niños, chucherías y pañales.
Pero la evidencia final fue lo que vieron en las cámaras de seguridad, las cuales mostraron el momento preciso en el que la mujer lanzó a la infante.
Por su parte el jefe de la policía de Galveston, Doug Balli, aseguró que este crimen es «horrible».
«Todos los niños merecen sentirse seguros cuando están cerca de sus seres queridos, especialmente con su propia madre. El Departamento de Policía de Galveston está comprometido a hacer justicia por Hannah y garantizar la seguridad de todos los niños de nuestra comunidad», puntualizó.
