En un impactante caso de abuso infantil, Rose Anderson, una madre de Texas (EEUU), ha sido arrestada por presuntamente encerrar a una niña, de siete años, en una jaula para perros durante horas bajo un árbol de Navidad.
De acuerdo con lo reseñado por el New York Post, el incidente ocurrió en Houston, donde Anderson, de 55 años, supuestamente ató a la niña con bridas y le tapó la boca con cinta adhesiva antes de encerrarla en la jaula como castigo por su comportamiento en la escuela.
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En consecuencia, alertaron a la policía de Houston del abuso y los agentes encontraron a la niña en condiciones deplorables, sin acceso a comida, agua o un baño. Esto la obligó a orinarse encima.
Según los documentos judiciales, Anderson también pateó la jaula mientras la niña estaba dentro, aumentando el sufrimiento de la menor.
Lo que se detalló, es que la niña fue liberada y Anderson fue arrestada en paralelo. La mujer enfrenta cargos de restricción ilegal y abuso infantil.
Como era de esperarse, el caso generó una ola de indignación en la comunidad local. Esto puso de relieve la necesidad de una mayor vigilancia y protección para los niños en situaciones vulnerables.
Vecinos y conocidos de Anderson expresaron su sorpresa y horror ante las acusaciones, describiéndola como una madre soltera que trabajaba tres empleos para mantener a su familia.
Sin embargo, este incidente habría revelado un lado oscuro y perturbador de su vida doméstica.
