Ismael “El Mayo” Zambada, quien enfrenta cargos por narcotráfico, negó entrega voluntaria y dice que fue «secuestrado» por EEUU.
“Deseo decir desde el principio que no me entregué y que no vine voluntariamente a Estados Unidos. Tampoco tenía ningún acuerdo con ninguno de los dos gobiernos. Al contrario, fui secuestrado y traído a Estados Unidos por la fuerza y contra mi voluntad”, insistió Zambada en la misiva de dos páginas, escrita desde la prisión federal y citada por la Voz de América (VOA).
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Esta declaración escrita es la primera que ofrece Zambada, de 76 años, tras haberse declarado “no culpable” de los siete cargos imputados en su contra en el Distrito Oeste de Texas. La mayoría por tráfico de narcóticos, uso de armas de fuego y homicidio.
El mensaje de Zambada se produce poco después de que el embajador de EEUU en México, Ken Salazar, informara que “El Mayo” Zambada llegó a Texas en un avión privado “contra su voluntad”.
Sin embargo, aclaró que el otro arrestado junto a él, Joaquín Guzmán López, sí se entregó.
LA VERSIÓN DEL ZAMBADA
Según la versión de Zambada, le aseguraron que estarían presentes junto a Iván Guzmán Salazar, otro de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, conocidos como “Los Chapitos”. La cita fue pactada a las 11:00 de la mañana en un centro de eventos a las afueras de Culiacán. Pero, EEUU aseguró que no estuvo implicado en la operación.
El embajador Salazar en conferencia de prensa indicó, sin dar detalles, que “esto era una operación entre los cárteles donde uno entregó al otro”.
El capo de la droga afirma que confió en la “naturaleza de la reunión” y llegó al lugar junto a José Rosario Heras López, comandante de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa, y Rodolfo Chaidez, a quienes nadie ha vuelto a ver, según el acusado.
“Me condujeron a otra sala que estaba a oscuras”, relató Zambada sobre su experiencia.
“En cuanto puse un pie dentro de aquella habitación, me tendieron una emboscada. Un grupo de hombres me asaltó, me tiró al suelo y me colocó una capucha de color oscuro en la cabeza. Me ataron y esposaron, y luego me obligaron a meterme en la caja de una camioneta”, agregó.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ya había dicho que Guzmán López estaba en negociaciones con autoridades estadounidenses para entregarse y sugirió que “El Mayo” pudiera haber hecho lo mismo.
Esto lo niega Zambada, quien recuerda los sucesos anteriores a su arresto como un “calvario”.
“Me sometieron a malos tratos físicos, que me causaron lesiones importantes en la espalda, la rodilla y las muñecas. Después me llevaron a una pista de aterrizaje a unos 20 o 25 minutos de distancia, donde me obligaron a subir a un avión privado”, dijo.
¿QUIÉN ES EL MAYO ZAMBADA?
«El Mayo», nacido en Culiacán en enero de 1948, fue requerido durante años por la justicia de Estados Unidos. Una nación que también persiguió y condenó a cadena perpetua a Joaquín «El Chapo» Guzmán, uno de sus socios en el Cártel de Sinaloa, quien está recluido en una prisión en Colorado.
A diferencia de El Chapo, conocido por su vida ostentosa y su constante aparición en los medios, El Mayo siempre mantuvo un perfil bajo. Su discreción lo convirtió en una figura legendaria en el mundo del narcotráfico.
A pesar de ser uno de los objetivos principales de las autoridades mexicanas y estadounidenses, El Mayo logró evadir la captura durante décadas. Su conocimiento del terreno, su capacidad de adaptación y su extensa red de informantes le permitió mantenerse un paso adelante de las autoridades de ambos países.
