Sudán sigue viviendo los efectos del golpe de Estado de 2021. Un nuevo enfrentamiento entre el Ejército y paramilitares este sábado habría dejado al menos tres civiles muertos y varios heridos a causa de la rivalidad entre dos generales que protagonizaron ese hecho en octubre de hace dos años.
La capital de Sudán, Jartum, despertó en medio de explosiones y disparos. Horas más tarde, el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) afirmó que tomó el palacio presidencial. Esa fuerza, comandada por el general Mohamed Hamdan Daglo «Hemeti», también aseguró que tomó el aeropuerto internacional. Tras ello, llamaron a la población y soldados a «levantarse» contra el ejército.
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Por contraparte, el general de las fuerzas militares y gobernante de facto de Sudán, Abdel Fatah al Burhan, también se pronunció. Señaló que ordenó movilizar las fuerzas aéreas «contra el enemigo».
Según al Burhan, es mentira que las FAR haya tomado el aeropuerto internacional. De igual forma, dijo que unos paramilitares se «infiltraron e incendiaron aviones civiles, incluyendo uno de Saudi Airlines».
En redes, ya circulan videos y fotos del choque entre ambos bandos. Testigos afirmaron a AFP que se enfrentan también frente a la sede de medios del Estado.
Enfrentamientos en Sudán: El grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) afirma haberle quitado al Ejército el control del aeropuerto internacional de Jartum y de otras bases militares. pic.twitter.com/sLG08iQDxh
— Caraota Digital (@CaraotaDigital) April 15, 2023
EXIGEN UN ALTO AL FUEGO
Volker Perthes, emisario de la ONU en Sudán, llamó a las dos partes a un alto al fuego «inmediatamente». Asimismo, la Unión Africana y el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, transmitieron su «profunda preocupación» por los enfrentamientos.
Rusia, por su parte, pidió a ambos lados tomar «medidas urgentes en vista de un cese al fuego».
El embajador de EEUU en Sudán, John Godfrey, describió que los residentes de Jartum están «atrincherados en sus casas». Escribió en Twitter que «como todos los sudaneses, estamos bajo resguardo».
«La escalada de tensiones entre militares, hasta el enfrentamiento directo, es extremamente peligrosa. Hago un llamamiento a los altos mandos militares para que pongan fin inmediatamente a los enfrentamientos», alertó.
