Congreso de Perú también declaró al Tren de Aragua como organización terrorista

Angel David Quintero
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Tren de Aragua

El Congreso de Perú aprobó este miércoles una moción que declara al Tren de Aragua como una organización terrorista, destacando su «estructura jerárquica, métodos violentos y fines desestabilizadores contra el orden constitucional peruano».

Esta decisión, impulsada por la bancada del partido fujimorista Fuerza Popular, recibió 77 votos a favor, 10 en contra y 3 abstenciones.

El pronunciamiento del Congreso también establece la creación de una comisión especial que trabajará durante 180 días junto con el Ministerio del Interior y otras instituciones para desarrollar estrategias concretas para combatir esta organización criminal en el país.

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Además, el Legislativo exhortó al Ministerio de Relaciones Exteriores a gestionar, junto a otros países de la región como Argentina, Colombia, Chile, Bolivia, Brasil, Panamá, Paraguay y Uruguay, la designación internacional del Tren de Aragua como una organización terrorista trasnacional.

El congresista Alejandro Muñante, defensor de la moción, consideró que esta medida representa «un primer paso» en la lucha contra esta agrupación delictiva, pero advirtió que aún se deben modificar las leyes para que estos grupos sean tipificados formalmente como terroristas dentro del marco jurídico peruano.

CRÍTICAS DE LA MEDIDA 

Los parlamentarios de izquierda Alex Flores y Guillermo Bermejo calificaron la resolución como una acción «simbólica» sin un impacto real en la lucha contra la criminalidad.

«De nada va a solucionar declarar como una organización terrorista a una banda criminal. Lo que debemos hacer es enfrentar a la criminalidad a través de una estrategia política», remarcó Flores durante el debate.

El pasado 10 de febrero la Policía Nacional del Perú (PNP) aseguró que el Tren de Aragua está «totalmente desarticulado» en el país y que sus principales líderes están recluidos en la prisión de máxima seguridad de Challapalca.

La presidenta Dina Boluarte también respaldó esta versión, afirmando el 27 de enero que la estructura de la banda está «prácticamente desbaratada» en Perú gracias a las acciones de la PNP y el Ministerio del Interior.

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