Los medicamentos para adelgazar, como Ozempic y Wegovy, han sido ampliamente utilizados en EEUU, y ahora el gobierno del presidente de la nación norteamericana, Joe Biden, busca dar un paso más allá.
Este martes, Biden propuso que estos fármacos estén cubiertos por los programas sociales de salud, una medida que podría tener un impacto significativo en la lucha contra la obesidad.
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«Esta propuesta permitiría a los estadounidenses y a sus médicos determinar el mejor camino a seguir para que puedan llevar vidas más sanas, sin preocuparse por su capacidad para cubrir estos medicamentos de su bolsillo, y en última instancia reducir los costos de atención médica para nuestra nación», apuntó Casa Blanca en un documento publicado este mismo martes.
Sin embargo, esta iniciativa conlleva un costo millonario para los contribuyentes. Además, solo podría avanzar con el apoyo de la próxima administración del presidente electo de EEUU, Donald Trump.
La propuesta del gobierno de Biden, que no especifica las marcas de los medicamentos, establece que solo las personas consideradas obesas, con un índice de masa corporal de 30 o más, podrían acceder a la cobertura dentro de los programas de Medicare y Medicaid.
Medicare ofrece cobertura médica a personas mayores de 65 años y a ciertas personas más jóvenes con discapacidades específicas. Por su parte, Medicaid proporciona cobertura médica para personas con bajos ingresos.
De acuerdo con la hoja informativa del gobierno, la nueva norma ampliaría el acceso a estos medicamentos para 3,4 millones de estadounidenses obesos. La mayoría beneficiarios de Medicare y otros cuatro millones de Medicaid.
Hasta ahora, algunas personas podían obtener cobertura de estos medicamentos a través de Medicare o Medicaid si tenían diabetes o estaban en riesgo de sufrir un derrame cerebral o una enfermedad cardíaca.
Sin embargo, no podían ser recetados para la obesidad debido a una ley que prohíbe a estos programas cubrir productos para bajar de peso.
La nueva norma propuesta por la administración Biden incluiría la obesidad como una enfermedad. En específico, que puede tratarse con la ayuda de medicamentos, lo que permitiría su inclusión en los programas de Medicare y Medicaid.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, aproximadamente el 40 % de los adultos estadounidenses son obesos. Este dato subraya la importancia de esta medida para la salud pública.
A pesar de que la propuesta ya se ha dado a conocer, es posible que no pueda prosperar. Sobre todo, antes de que Biden deje la presidencia el próximo 21 de enero. Además, no está claro si Donald Trump, en caso de asumir la presidencia nuevamente, seguiría adelante con esta iniciativa.
